El colchón es uno de los grandes olvidados cuando hacemos nuestra rutina de limpieza en casa. La principal razón es que solemos pensar que debe hacerlo una empresa especializada o que necesitamos recursos que no están a nuestro alcance. Pero, ¿sabías que puedes limpiar el colchón con bicarbonato tú mismo?
Quédate con nosotros para que tu colchón quede como nuevo, especialmente si tiene manchas difíciles. Con esta técnica, además, te protegerás de posibles enfermedades que pueden producir los ácaros y demás microorganismo. Sigue leyendo para no perderte ningún detalle.
Índice
Limpiar el colchón con bicarbonato paso a paso
Limpiar las manchas del colchón te hará mantener un ambiente de descanso higiénico y saludable. El bicarbonato de sodio es muy útil debido a sus propiedades desodorizantes y antibacterianas, además de ser un aliado económico y eficaz para esta labor. A continuación, te presentamos una guía muy sencilla de seguir. Paso a paso lograrás que cada colchón de tu casa esté impecable.
Paso 1: preparación
Si ya tienes el bicarbonato de sodio para limpiar, lo primero que debes hacer es retirar toda la ropa de la cama, mantas y sábanas.
Es imprescindible contar con una aspiradora, que te ayudará a eliminar todo el polvo y, por supuesto, los ácaros de la superficie de tu colchón.
Una vez que cuentes con todos estos artículos, ten por seguro que terminarás con la suciedad que pueda estar alojada en el colchón. Hay que evitar que el bicarbonato, cuando lo procedamos a esparcir, se mezcle con las motas de polvo y demás microorganismos que pretendemos eliminar.
Paso 2: limpieza superficial
Antes de limpiar el colchón con bicarbonato, pasa bien la aspiradora por toda la superficie.
Una vez que hayas terminado de aspirar todo el colchón, haciendo especial hincapié a los pliegues, debes recurrir al agua y al jabón neutro. Te servirá cualquier paño o trozo de tela vieja que tengas en tu hogar.
Humedece con un poco de agua el paño, añadiendo una pequeña cantidad de jabón, y frota muy bien cada centímetro del colchón, especialmente en aquellas zonas en donde son visibles las manchas. Cuida de no mojarlo excesivamente, para que se pueda secar rápidamente.
Después de aplicar el jabón, vuelve a pasar el paño húmedo, esta vez sin nada más que agua, a fin de eliminar la sensación jabonosa y, con ella, la suciedad. No te preocupes si aún queda la superficie ligeramente humedecida. Es el momento del siguiente paso: limpiar con bicarbonato.
Paso 3: aplicación de bicarbonato
Espolvorea el bicarbonato de sodio por cada centímetro del colchón. No temas en crear una capa generosa de este producto, sobre todo en las áreas más sucias o donde percibas peor olor.
En este paso debes tener paciencia si quieres que el efecto del bicarbonato sea efectivo. Lo tendrás que dejar actuar durante varias horas, incluso dejarlo de un día para otro. Durante este tiempo, su acción permitirá absorber toda la humedad acumulada, además de desinfectar y, por supuesto, acabar con todos los olores desagradables.
Paso 4: retirada del bicarbonato
Una vez que el bicarbonato ha cumplido su función, necesitarás la aspiradora para poder retirarlo. Asegúrate de eliminar todo resto de este producto.
Paso 5: ventilación y secado
El último paso al limpiar el colchón con bicarbonato es también muy importante. Deberás dejar que el colchón se airee y se termine de secar por completo, antes de volver a colocar la ropa de cama. Lo mejor que puedes hacer es exponerlo al sol, ya que los rayos ultravioleta permiten terminar de desinfectarlo.
Entre los consejos adicionales que te ofrecemos, para eliminar definitivamente las manchas más difíciles, como las de orina, está la mezcla de bicarbonato con vinagre o agua oxigenada, justo antes de espolvorear el bicarbonato seco.
Si quieres que tu colchón esté siempre en óptimas condiciones, repite esta limpieza dos veces al año. Su mantenimiento regular con bicarbonato no solo garantiza un espacio limpio y fresco para descansar, sino que también prolonga su vida útil.
Otras formas de limpiar un colchón
Existen otras formas de limpiar un colchón que te pueden ser también muy útiles. Por ejemplo, el vinagre, que suele estar en todas las casas, te puede venir genial para este fin. Solo necesitarás mezclar en cantidades iguales agua y vinagre, ya sea de manzana o de vino. Lo puedes rociar directamente en el colchón con ayuda de un atomizador. Una vez que lo hayas hecho, frota el líquido sobre la superficie con un cepillo de cerdas suaves. Déjalo secar antes de volver a colocar la ropa de cama.
Otro método que te funcionará es el detergente líquido, que se usa comúnmente para la lavadora. Mézclalo con agua, preferentemente tibia, y extiéndela en sobre el colchón con un paño, humedeciéndolo ligeramente. Frota toda la superficie y retira, acto seguido, el exceso de jabón con el paño humedecido solamente con agua. Déjalo secar al aire libre, aunque te puedes ayudar de un ventilador de mano o secador para acelerar el proceso.
Una limpiadora a vapor te será idónea para el siguiente método. El vapor no solo acabará con los ácaros, sino que también te ayudará a combatir otros microorganismos. Puedes combinar su uso con el bicarbonato, para lograr un mejor efecto de limpieza. Te aconsejamos que leas muy bien las instrucciones del fabricante para evitar cualquier problema.
Para las manchas que aparentan ser imposibles, el peróxido de hidrógeno al 3 % te será de gran utilidad. Aplícalo sobre un paño húmedo y ejerce una presión suave al frotarlo sobre la superficie del colchón. Enjuaga con un trapo ligeramente humedecido y deja que se seque, preferentemente bajo los rayos del sol.
Como ya has visto, limpiar el colchón con bicarbonato es una manera sencilla de mantener higienizado el lugar de descanso de toda la familia. No te llevará mucho esfuerzo y obtendrás un resultado excelente, siguiendo cada paso que te hemos indicado.